Kaylene ha sufrido varios traumatismos a causa de un inexplicable accidente de coche, por lo que permanece ingresada unos días. La enfermera que tiene a su cargo se ofrece a continuar los cuidados en su domicilio, hasta que pueda valerse por si misma. Lo que ni su marido ni ella imaginan es que la enfermera no es quien dice ser y tiene un plan oculto que ha puesto en marcha desde que llegaron.