Sin hijos narra la historia de Marina, un alma libre que viaja desde que acabó la escuela y siempre ha estado enamorada de Fidel. Él, un solitario, rechazó la oferta de Marina de viajar por atender la tienda de música de su abuelo y quedarse amarrado a algo seguro. Un día, Marina decide regresar a buscarlo a ver si está solo. Cuando se encuentran, los dos vuelven a sentir las mariposas que sintieron años atrás pero las cosas se complican cuando Fidel, que es papá soltero y cuya vida entera es su hija, descubre que ella es un bicho raro al que no le gustan los niños y a los niños no les cae bien ella.